EJERCICIOS CON MAPAS MENTALES
EJERCITA POCO A POCO
Es cierto la practica hace al maestro y lo que hace que una persona sea realmente buena en algo no nace solo de una habilidad o talento nace de la practica constante y de la perseverancia.
“ NO me vuelvo más
creativo” “ No dibujo mejor” “ no se me ocurre nada” “ Esta padre hacer
dibujitos pero lo mío es escribir como siempre” … en mi apunte de siempre, mi cuaderno de siempre con mi cerebro de siempre.
Todas estas CREENCIAS y
la poca paciencia que tenemos aunado al factor que ha caracterizado a la
sociedad de hoy “ Rapidito y de buenas, lo quiero para ayer”
característica principal de nuestra generación nespresso, hacen que los mapas mentales en sus primeros acercamientos no cumplan su función.
Estamos acostumbrados a
hacer todo por computadora, incluso hay programas de mapas mentales como
mindjet que nos lleva de la mano para hacerlo. El MAPA MENTAL hecho
a mano siembra poco a poco una cosecha que se vera abundante en
habilidades, hacerlo a mano es lo que en realidad le da valor al mapa
sobre todo cuando estas empezando.
Les comparto un ejemplo real de un alumno real, en una situación de examen extraordinario muy real.
El
escenario era bastante dramático, mi querido alumno se creía poseedor
de una mente poco privilegiada de hecho estaba convencido de que su
memoria a largo plazo estaba completamente destruida gracias a la
evaluación de una terapeuta en dónde lo sentenciaba a tomar un
medicamento y a resignarse a tener que esforzarse el doble.
Con este contexto nos
enfrentamos muchos maestros, debemos encontrar el camino para llegar al
alumno y darle un poco de confianza . En un caso como este no bastará
decirle que es un campeón sobre todo cuando es un adolescente de 16 años
como fue el caso. Habrá que crear las oportunidades que hagan evidente
su capacidad, su esfuerzo y resultado todo hecho por el mismo con un
poquito de guía.
Este fue su primer
pre-mapa mental, desde luego me veía con cara de incredulidad y esperaba
que yo le dijera… “ la terapeuta tiene razón, vaya que no tienes
memoria a largo plazo”. Lo cual por supuesto nunca sucedió.
Como era de esperarse mi
alumno en cuestión se resistía a dibujar, “Soy malísimo” me decía “ mis
dibujos son horribles” a lo que yo contestaba no te preocupes mira como
yo también soy mala el chiste de estas imágenes y garabatos es que nos
ayude a recordar, observa.
Los primeros mapas
mentales fueron mi creación en cuanto a dibujos, pero ambos decidíamos
la información relevante , analizábamos, sintetizábamos y razonábamos
juntos.
La magia sucedió cuando
empezó a reproducir oralmente los mapas ¿ puedes contarme tu mapa? Y se
soltaba explicando cada detalle del mapa, gracias a las asociaciones y
al conocimiento previo no hacía falta aprenderlo de memoria. Las
imágenes eran su principal apoyo, las palabras clave y los colores.
Esto por supuesto fue
incrementando su confianza pero aún había cierta incredulidad en el, “
pues muy bien lo puedo decir ¿pero lo estoy viendo no? ¿Ahora como me lo
aprendo todo? ¿Estoy perdiendo el tiempo en dibujar?”
Pasamos a la fase de
visualización y le pedí que le tomará una foto con los ojos, que cerrara
los ojos y viera el mapa en su mente. Le pedí que me contará su mapa y
así lo hizo de manera detallada y certera. No dudó, no se puso nervioso,
todo lo contrario aceptó el reto sin saber que ya en ese momento estaba
en proceso de memorizarlo.
Sonrió y mucho, lo
disfruto por unos momentos cuando me dijo… “ para mañana seguro que ya
se me olvido” ¿pero por qué? , Miss por mi memoria.
Bueno eso no lo creo. No
dije más. Lo que le pedí es que el empezará a hacer los mapas y los
trajera empezados. Observa su desarrollo a través de las imágenes.
Al principio llegaba un
poco molesto pero era pena de enseñarme sus dibujos, yo no hacía alusión
a ellos y le pedía que me lo contará, lo hacía muy bien y yo alababa
que el mapa cumpliera su función. Jamás puse énfasis en su habilidad
como dibujante o en los colores que elegía porque esas cosas
evidentemente no son el objetivo del mapa mental.
Cada día, cada mapa,
adquiría más y más confianza, cada día la práctica lo convertía en un
mejor hacedor de mapas mentales, mapas mentales que cumplen su función.
Aunado a los mapas
utilizábamos la técnica de estudio que complementa la función de los
mapas EL REPASO y cada día repasábamos desde el mapa uno al actual.
El obtuvo una calificación de 9 en el examen extraordinario de quinto año de preparatoria en la materia de historia.
Lo mejor de esta
experiencia de aprendizaje fue ver su desarrollo. La confianza en el
mismo fue creciendo a partir de sus propios resultados comenzó a creer
en el mismo y en su capacidad. “ Creo que mi memoria a largo plazo si
funciona Miss”, Creo que has aprendido a ejercitar tu cerebro y a hacer
que trabaje para ti, pensé yo en voz alta.
Meses después el hermano
del alumno en cuestión me busco para que le ayudara a estudiar una
materia complicada utilizando los mapas mentales y me platico como su
hermano ha seguido haciendo mapas, “ Miss hizo un mapa gigante y lo pego
en la pared para poder estudiar. Le puso mil cosas y se lo aprendió
todo” , es otro Miss, es otro ahora se encierra para estudiar y se
apasiona.
¡SE APASIONA para
estudiar! En fin, que el mapa nos permitió a la familia de mi alumno y a
mi lograr que el saliera adelante con ganas de querer seguir adelante.
A nosotros como adultos
nos cuesta ser perseverantes, nos cuesta cambiar o instaurar hábitos.
Los alumnos necesitan adultos que los guíen a adquirirlos, que los
motiven a seguir, a aprender que lo normal es seguir un proceso para
llegar a una meta. Para mi y los alumnos que han compartido esta
experiencia desde hace muchos años los mapas mentales SON LA CLAVE y el
principio de un nuevo camino de aprendizaje.
