Recientemente leí este cuento y he de decir que me ha encantado.
Me gusta leer y releer historias, analizarlas, demenuzarlas y decubrir todas las posibilidades que ofrecen a través de su lectura y posterior trabajo.
Es el caso de La oruga verde, que narra la historia de una pequeña oruga a la que le gusta disfrutar del rocío de la mañana y de los manjares que le ofrece el campo.
Me gusta leer y releer historias, analizarlas, demenuzarlas y decubrir todas las posibilidades que ofrecen a través de su lectura y posterior trabajo.
Es el caso de La oruga verde, que narra la historia de una pequeña oruga a la que le gusta disfrutar del rocío de la mañana y de los manjares que le ofrece el campo.
Un buen día, mientras estaba comiendo un poquito de aquí y un poquito de allá, se le acercó una preciosa mariposa amarilla.
La oruga verde, emocionada, la invitó a jugar, pero esta no tenía tiempo. Tenía mucha prisa por llegar al bosque y oler las flores. La oruga verde se quedo muy triste.
Poco a poco, se le fueron acercando mariposas de distintos colores pero todas rechazaban su invitación.
La oruga verde no entendía porqué las mariposas no querían jugar con ella. Se puso tan tan triste, que decidió que ya no quería ver más el cielo ni las flores.
¿Y qué hizo? Tejer un fino hilo de seda, envolverse en él y echarse a dormir.
Y ahí, en su casita, permaneció durante mucho tiempo. Ni tan siquiera las gotas de lluvia fueron capaces de despertarla de su largo sueño hasta que un día, decidió salir. Pero ya no era una oruga verde. Se había convertido en una hermosa mariposa de mil colores a la que le encantaba oler la fragancia de las flores. ¡Eran maravillosas!
De repente, se encontró con todas las mariposas de colores que antes no quisieron jugar con ella. Ahora entendía porqué tenían tanta prisa por ir a oler las flores. Es que era un olor irresistible. La mariposa que antes fue la oruga verde, ya no estaba triste.
Ahora era una mariposa, tenía nuevas amigas y juntas podrían jugar y volar entre las flores que, gracias al aire, esparcían sus muchas fragancias.
SU APLICACIÓN DIDÁCTICA
A través de este bonito cuento, descubrimos el proceso de metamorfosis de la oruga en mariposa.
Mediante la repetición de los hechos, se favorece la comprensión correcta de la historia por parte del niño. También la secuencia ayuda a que le resulte sencillo y atractivo y se enganche a la historia, que transcurre de forma continua y rápida.
A niveles más básicos, podemos trabajar los colores, a través de las distintas mariposas.
También nos permite trabajar con el niño el rencor, en cuanto que la oruga, una vez se ha convertido en mariposa, no guarda rencor al resto de mariposas que un día no quisieron jugar con ella y se une a su juego. Así pues, también trabajamos la amistad y el perdón.
Las emociones es otro aspecto que podemos trabajar a través de él, pudiendo observar cómo la oruga, que en un primer momento estaba contenta y era feliz, pasa a estar triste y finalmente retoma la alegría que tenía.
Todo esto nos da pie a preguntar al sobre situaciones que le pongan triste y qué se le ocurre que puede hacer para solucionar el problema y volver a estar contento.
Tras la lectura del cuento, el niño puede realizar un dibujo secuenciado del proceso de metamorfosis de la oruga.
Así, primero haría un dibujo de la propia oruga verde, otro del momento en el que se ha envuelto en un capullo y por último, un dibujo ya convertida en mariposa.
Podemos jugar a ordenar la secuencia del cuento incluso añadir más escenas y hacerla tan larga como queramos.
Sin duda alguna os lo recomiendo y espero que disfrutéis de él tanto como lo he hecho yo.
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