Desde "TO's En Formación", nos explican, en términos teóricos, el desarrollo en el primer mes de vida del niño y qué estímulos ambientales favorecen su adaptación al entorno que le va a acompañar desde el momento del nacimiento en adelante.
Punto de partida:
- Ajuste fisiológico y adaptación entre el niño y la mamá.
- Despliegue de conductas reflejas primarias: responde a estímulos pero con respuestas involuntarias.
- Sus capacidades sensoriales ya funcionan, aunque no tienen posibilidad de discriminar la información sensorial y de elaborar respuestas motoras adecuadas.
Habilidades de desarrollo Motriz:
En el primer mes, los movimientos corporales aun son movimientos globales y en masa, no coordinados.
Boca arriba: asimetría corporal (Reflejo del espadachín: un brazo y una pierna del mismo lado flexionados, y las contralaterales extendidas).
- En el paso de boca arriba a sentado mediante tracción de sus antebrazos, la cabeza cae hacia atrás.
Boca abajo: la pelvis está elevada, las extremidades superiores e inferiores flexionadas y los puños cerrados. Cuando esté despierto favorece esta postura para potenciar el control de la cabeza y la exploración del ambiente.
- Intenta levantar la cabeza.
- Extiende las rodillas, patalea o hace movimientos de reptación.
De costado: Orientación lateral.
- Se cambia involuntariamente a boca arriba.
Habilidades de desarrollo Perceptivo-Cognitivo Manipulativo:
Fijación visual: ante un estímulo visual delante de su cara o en el rostro de un adulto que le habla delante de su cara (30 cm.).
- Realiza el seguimiento visual intermitente de un objeto en un arco de 90º.
- Reacciona a ruidos fuertes, se sobresalta.
Coordinación mano-boca.
- Las manos se encuentran comúnmente cerradas con el pulgar enclaustrado en el puño.
- Reflejo de prensión.
Habilidades de desarrollo Comunicativo y Social:
Fijación visual a objetos y personas: muestra atención incipiente hacia la persona que le habla y hacia los objetos que se le muestran.
Imitación: imita casualmente gestos como sacar la lengua o abrir la boca.
Usa un llanto diferente para expresar diferentes estados (hambre, sueño, malestar…).
Cesa de llorar cuando se le habla o se le coge en brazos. Si le coges en brazos:
- Sujeta bien la cabeza para favorecer una buena interacción cara a cara.
- Favorece la relajación sujetando su cabeza en una posición de arrullo, asegurando su sujeción, restringiendo suavemente el movimiento corporal.
Emite sonidos guturales.
Hace movimientos de succión antes de darle el pecho o el biberón, a modo de anticipación.
Reflejos de succión y de búsqueda.
Sonrisa fisiológica (tipo mueca): cuando está cómodo o después de comer.
Estímulos Ambientales
Hay que tener en cuenta una serie de estímulos, para ayudar al pequeño a adaptarse a su nuevo entorno.
Iluminación: la luz que se le proporcione no tiene que dirigirse de forma directa a los ojos del niño. Evitar los cambios bruscos, favorecer su adaptación.
Sonidos: háblale, la voz humana es su preferida. Evita cambios bruscos de sonidos, así como su ausencia o constancia.
Espacio: necesita su propio espacio, si es reducido mejor, le gusta sentirse arropado y abrazado.
